Andrés Mijes niega campaña anticipada… pero los hechos dicen otra cosa

Mientras los ciudadanos lidian con baches, inseguridad y servicios públicos deficientes, el alcalde de Escobedo, Andrés Mijes, paga una campaña de limpieza de imagen con miras a una candidatura. Aunque públicamente insiste en que “no está en campaña”, cada movimiento suyo revela lo contrario.

La campaña que “no es campaña”

Mijes ha multiplicado su presencia en eventos públicos, entrevistas, recorridos y entregas de apoyos. Todo documentado, fotografiado y difundido con una narrativa personalista. En redes sociales, los anuncios pagados con dinero público inundan el timeline de los habitantes de Escobedo, repitiendo slogans como si se tratara de una contienda electoral… pero sin que oficialmente lo sea.
La estrategia va más allá de las publicaciones: se han identificado millones de pesos invertidos en la compra de notas “a modo” sobre supuestos avances en seguridad, posicionando al alcalde como un héroe en un municipio que, en la realidad, sigue plagado de asaltos, extorsiones y violencia.

Recursos públicos al servicio de la imagen

Empleados municipales han sido comisionados a tareas que no corresponden con sus funciones, sino con el reforzamiento de la figura del alcalde. Vehículos oficiales son usados en giras que parecen más mítines disfrazados de gestiones, y la opacidad en los gastos de comunicación social crece al mismo ritmo que su exposición mediática.
Todo indica que los recursos del municipio se están desviando para sostener una precampaña permanente, mientras las necesidades urgentes de la ciudadanía son postergadas o maquilladas con propaganda.

Escobedo, trampolín electoral

Mijes no está actuando solo. Forma parte del Cártel de Escobedo, una red de poder que ha convertido el gobierno local en una plataforma de ambición política. Al igual que sus antecesores, usa la estructura pública para avanzar sus intereses personales, repitiendo la fórmula: negar públicamente la campaña, pero invertir todo en sostenerla.
Negar es fácil. Lo difícil es esconder lo evidente.
Y en Escobedo, la evidencia está en cada espectacular, cada nota comprada y cada patrulla usada como propaganda.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *